Una parte muy curiosa e interesante en mecánica es el sistema de dirección de vehículos con ruedas. Cuando un coche gira para tomar una curva o cambiar de dirección en un cruce, se producen unos efectos muy concretos. No se trata simplemente que la rueda mire hacia la nueva dirección, no. También hay que ver, y esto es lo más importante, que cada rueda tiene un comportamiento diferente.
Esto es debido a que, en el giro, se toma un centro de giro, es decir, hay que considerar el punto central de la circunferencia que se va a describir en el giro, y ahora, cada rueda, ya sea la interior o la exterior a la curva, sigue su propia trayectoria, lo que se traduce en su propia circunferencia concéntrica.
Como son dos circunferencias (voy a dejar de lado las ruedas traseras, ya que éstas simplemente son arrastradas por las ruedas motrices), cada una va a una velocidad de giro diferente (de esto se encarga el diferencial en un vehículo comercial), pero es que además, el avance tiene una velocidad angular distinta para cada rueda.
Vamos a ver un modelo sencillo… tras construirlo, se aprecia en los giros como se rompe la simetría y las líneas paralelas, y eso es lo que ayuda a tomar las curvas o a realizar los cambios de sentido.
La imagen de la cabecera muestra el despiece para hacer este sistema de dirección, pero por si acaso, en este enlace se debe ver también. No es el único, hay muchos más… por ejemplo, en wikipedia tenemos esto.